Tarimas de bambú: soluciones ECO

En este post hablaremos sobre las tarimas de bambú y sus múltiples beneficios. El bambú es la materia prima que se presenta como la solución ecológica presente y futura para frenar la deforestación.

¿Qué es el bambú?

El bambú se trata de una planta con un crecimiento incomparable a la de árboles. Y es que, algunos tipos capaces de crecer hasta 90 cm al día, alcanzando su tamaño máximo a los 6 años, con alturas de hasta 25 m y diámetros de 30 cm en algunas especies.

tarimas de bambú

A esta capacidad de proporcionar gran cantidad de materia prima de forma sostenible, se suman otros beneficios medioambientales, dado que los bosques de bambú son muy eficientes absorbiendo CO2, hasta un 30% más que muchas especies de árboles, produciendo a su vez mayor cantidad de oxígeno.

Características únicas

El bambú por tanto empieza a imponerse como material de construcción. Se trata de una madera con una durabilidad excepcional. Dada su alta compacidad y baja absorción de agua, no suele sufrir durante el paso de los años de hongos u otros parásitos.

tarimas de bambú

En el caso de los suelos de tarimas de bambú, el material presenta unas características intrínsecas que lo hacen idóneo para este uso, igualando las propiedades de otros tipos de madera, incluso presentando muchas ventajas respecto a muchas de ellas. Tiene una dureza mayor que el roble y de haya, aunque en apariencia pueda parecer frágil.

Además, el bambú no se contrae ni dilata fácilmente con los cambios de temperatura o humedad, como sucede habitualmente en otros suelos de madera. Asimismo, ayuda a regular la temperatura ambiental, resultando suelos cálidos en invierno y frescos en verano. Además, son compatibles al 100% con la instalación de calefacción por suelo radiante.

Otra de las características que lo hacen un material único es que absorbe eficientemente el ruido, y además son antialérgicos, puesto que retienen poco polvo, lo que mejora la calidad de vida.

Como vemos, el bambú es el material del futuro, y, además de ser una solución para el medio ambiente, también lo será para nuestro bolsillo. La regulación térmica ayudará a que tu casa mantenga una temperatura correcta y, además, el desgaste es mínimo, por lo que tardarás muchos años en tener que cambiarlo.

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